El rollo de calabacín con relleno de queso y jamón cocido es un plato muy apetitoso y es una excelente opción para la cena.
Está compuesto principalmente por calabacines, que actúan como envoltura y aportan una nota de frescura.
Dentro del rollo, el relleno está compuesto por una combinación de queso y jamón cocido que lo hace realmente irresistible.
Los calabacines, ligeramente crujientes, ya que están gratinados al horno con pan rallado, y frescos, contrastan agradablemente con la cremosidad del queso y la ternura del jamón cocido.
El queso, con su cremosidad, envuelve y amalgama los otros ingredientes creando un sabor armonioso. La ligera salinidad del jamón cocido completa el plato.
Cuando el rollo se corta en rodajas, se pueden ver las diferentes capas, y es ahí donde el ojo se detiene y queda conquistado. El despliegue de colores y el corazón cremoso del queso lo hacen irresistible.
Ideal para muchas ocasiones, desde una cena en familia hasta un aperitivo elegante. Es un plato que se puede servir frío o a temperatura ambiente, lo que lo hace ideal también para bufés o pícnics.
Su ligereza y su delicado sabor lo hacen perfecto para los meses de verano, pero se puede disfrutar todo el año.
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- Dificultad: Muy fácil
- Costo: Económico
- Tiempo de preparación: 10 Minutos
- Porciones: 2
- Métodos de Cocción: Horno eléctrico
- Cocina: Italiana
- Estacionalidad: Todas las estaciones
Ingredientes para la preparación del rollo de calabacín
- 3 calabacines
- 4 rebanadas scamorza ahumada
- 3 rebanadas jamón cocido
- c.s. pan rallado
- c.s. aceite de oliva virgen extra
- c.s. sal fina
Herramientas para la preparación del rollo de calabacín
- 1 Mandolina
- 1 Bandeja de horno
- Papel de horno
- Papel absorbente
- 1 Freidora de aire Freidora de aire
Pasos para la preparación del rollo de calabacín
PARA UNA PREPARACIÓN PERFECTA MIRA LA VIDEO RECETA
Elige calabacines frescos, de tamaño medio. Lávalos cuidadosamente bajo el agua corriente y sécalos con papel absorbente.
Con una mandolina, corta los calabacines en rodajas finas a lo largo, tratando de obtener rodajas de grosor uniforme para garantizar una cocción homogénea.
Forra una bandeja de horno con papel de horno y cubre la superficie con pan rallado y un chorrito de aceite de oliva virgen extra, ve el video. Coloca las rodajas de calabacín de manera que formen un rectángulo. Las rodajas deben superponerse ligeramente para evitar que el relleno se salga.
Hornea durante unos diez minutos a 220 grados en horno o en freidora de aire 5 minutos a 200 grados
Terminada la cocción, sala y rellena con las rebanadas de jamón cocido y las rodajas de scamorza ahumada. Con la ayuda del papel de horno, comienza a enrollar todo desde el lado más largo, tratando de mantener el rollo compacto. Este paso requiere delicadeza para evitar que los calabacines se rompan.
Enróllalo bien y colócalo en el horno caliente durante otros 5 minutos o en la freidora durante 2 minutos a 180
De esta manera, el queso se fundirá haciendo que el corazón sea cremoso.
Deja reposar a temperatura ambiente durante media hora. Este tiempo de reposo permite que el rollo se compacte y que los sabores se mezclen.
Sirve tanto tibio como frío y…
¡Buen provecho de parte de Barbara!
Conservación y consejos
Usa calabacines frescos y si puedes cómpralos en mercadillos de Km 0
Conserva el rollo de calabacín en el frigorífico durante dos días en un recipiente hermético.
Se puede consumir tanto frío como recalentado en el horno.
