Pasos para la caja de galletas surtidas, una sola masa

• Para realizar esta deliciosa caja de galletas surtidas es necesario preparar primero la masa quebrada. Como primer paso, podéis utilizar una amasadora o cualquier robot de cocina o simplemente amasar todo a mano en un bol. Yo, por comodidad, utilicé la amasadora. En el bol de la amasadora, verter y tamizar la harina 00 y la fécula de patata, colocar la mantequilla fría de la nevera en cubitos, la sal y la esencia de vainilla. Mezclar todo para obtener la famosa «textura de arena», se llama así porque se asemeja a la arena. Finalmente, añadir el azúcar glas y el huevo y mezclar de nuevo hasta obtener una masa lisa y homogénea. Coger un tercio de la masa y añadir el cacao amargo y con las manos amasar para conseguir también la masa oscura de cacao. Compactar ambas masas y dejarlas reposar en el frigorífico envueltas en film transparente durante 1 hora. Si queréis, podéis preparar la masa quebrada también el día anterior.

  

• Para realizar el muñeco bastará con extender la masa de cacao con un rodillo y utilizando un cortador de galletas de muñeco de jengibre obtener los muñecos. Con la masa blanca, hacer pequeños corazones que colocaréis en el centro del abdomen. También hacer los muñecos con la masa blanca y utilizando la de cacao hacer pequeñas estrellitas y colocarlas también en el centro del abdomen. Con la otra masa de cacao, realizar la galleta en forma de herradura formando un pequeño cordón y cerrándolo para formar una C.

  

• Con el resto de la masa quebrada blanca, hacer las demás galletas. Basta con extender la masa usando el rodillo y cortar utilizando los diferentes cortadores que tengáis a disposición. También podéis realizar galletas rellenas. Calculando que la mitad de las galletas serán enteras y la otra mitad estarán perforadas en el centro con estrellas o corazones. Colocar todas las galletas en una bandeja forrada con papel de hornear y cocer en el horno precalentado a 180º por 13-15 minutos.

  

• Cuando las galletas estén cocidas y frías, decorarlas al gusto utilizando chocolate negro, blanco y con leche previamente fundido. Dejarlas secar completamente durante una hora. Para las galletas rellenas, podéis utilizar mermelada o nutella. Si utilizáis la forma de la galleta holandesa, basta con glasearla con chocolate blanco y luego sumergirla en azúcar granulado. Y aquí están listas, luego solo tenéis que llenar la caja o un recipiente de lata y regalarlas o servirlas a vuestros invitados. Espero que os guste esta última receta mía, ¡hasta la próxima amigos!