La bechamel de calabaza es la variante otoñal y colorida de la clásica bechamel, perfecta para dar un toque de originalidad a tus platos.
Fácil y rápida de preparar, esta receta es la aliada ideal para quien quiere llevar a la mesa un condimento cremoso, ligero y de sabor delicado.
Preparar la bechamel de calabaza es sencillísimo: te bastan pocos ingredientes, una buena calabaza de temporada y unos minutos de paciencia.
Esta versión, sin mantequilla, es excelente para lasañas de calabaza, para mantecar un risotto cremoso, o para acompañar verduras al horno y segundos de carne blanca.
Gracias al sabor naturalmente dulce de la calabaza, la salsa resulta más ligera y digestible, perfecta también para los niños.
En mi trabajo de organizador de alimentos, adoro proponer recetas simples que ayuden a optimizar tiempo e ingredientes en la cocina: la bechamel de calabaza es una excelente solución anti desperdicio, porque puedes prepararla con antelación y conservarla por varios días.
Si buscas una idea rápida y genuina para dar un toque de color a tus platos otoñales, esta receta te conquistará. Veamos juntos cómo preparar una bechamel de calabaza fácil y rápida, paso a paso!
Prueba también:

- Dificultad: Fácil
- Costo: Económico
- Tiempo de preparación: 5 Minutos
- Porciones: 2 Personas
- Métodos de Cocción: Horno
- Cocina: Italiana
- Estacionalidad: Otoño, Invierno, Otoño
Ingredientes para la bechamel de calabaza
- 100 g calabaza (de cualquier tipo)
- 250 ml leche desnatada
- 25 g harina
- c.s. especias (nuez moscada, cúrcuma)
- c.s. sal
Herramientas
- 1 Cacerola cacerola
- 1 Batidor batidor de mano
Pasos para realizar la bechamel de calabaza
Pelamos y cortamos la calabaza en cubos. En una sartén, ponemos un poco de aceite y añadimos la calabaza. Ajustamos con una pizca de sal, añadimos las especias y la dejamos cocinar y dorar hasta que esté bien tierna. Si es necesario, añadimos solo un poco de agua. Cuando esté cocida, podemos aplastarla con un tenedor o pasarla por la batidora, según la consistencia que más nos guste.
Ponemos en una cacerola la harina, mejor si está tamizada. Añadimos a hilo la leche mientras mezclamos con un batidor.
Ahora podemos ir al fuego.
Encendemos a fuego lento y mezclamos con el batidor hasta que la mezcla espese. En cuanto empiece a espesarse, apagamos el fuego.Ahora vertemos la calabaza cocida y mezclamos bien. De esta manera realizaremos nuestra bechamel perfumada con calabaza y especias. Dejamos enfriar.
Cómo conservar la bechamel de calabaza
Para conservar mejor tu bechamel de calabaza, déjala enfriar completamente a temperatura ambiente antes de transferirla a un recipiente hermético. En el frigorífico se mantiene fresca por 2-3 días, lista para usar en pasta, lasañas o verduras gratinadas.
Si quieres prepararla con antelación para varios días, también puedes congelarla: divídela en porciones y colócala en frascos de vidrio o envases aptos para el congelador. Cuando la vayas a utilizar, solo tendrás que descongelarla lentamente en la nevera y calentarla en un cazo, añadiendo un chorrito de leche para recuperar su consistencia cremosa.
Un pequeño truco de organizador de alimentos: si temes que se forme una película en la superficie en la nevera, cubre la bechamel con film de contacto. Así quedará lisa y lista para verter sin grumos!