Con la llegada de la primavera, estamos buscando recetas para aprovechar la deliciosa fruta que esta temporada nos ofrece. El crumble de fresas vegano y ligero es el postre ideal para quienes aman los sabores simples, genuinos y aromáticos.
Perfecto para la primavera y el verano, cuando las fresas están en su punto de dulzura máxima, este postre es un capricho ligero que conquista al primer bocado. Preparado sin mantequilla ni derivados animales, es perfecto para quienes siguen una alimentación vegana o desean un postre más sano y natural, sin renunciar al sabor, con solo 230 kcal por porción.
La receta es facilísima y rápida: solo se necesitan pocos ingredientes para crear un crumble crujiente por fuera y suave por dentro, con un corazón jugoso de fruta. El aroma que desprende al cocerse es simplemente irresistible, ¡te enamorarás!
Es la idea perfecta para un desayuno especial, una merienda ligera o un postre de último minuto para compartir con amigos y familia. Además, puedes prepararlo con antelación y disfrutarlo tanto caliente como frío: siempre está delicioso.
Descubre cómo realizar este crumble de fresas vegano
Prueba también:

- Dificultad: Fácil
- Costo: Económico
- Tiempo de reposo: 10 Minutos
- Tiempo de preparación: 10 Minutos
- Porciones: 4 Personas
- Métodos de Cocción: Horno
- Cocina: Italiana
- Estacionalidad: Primavera, Verano
- Energía 285,34 (Kcal)
- Carbohidratos 33,02 (g) de los cuales azúcares 18,30 (g)
- Proteínas 5,45 (g)
- Grasa 16,22 (g) de los cuales saturados 1,83 (g)de los cuales insaturados 13,76 (g)
- Fibras 4,68 (g)
- Sodio 5,73 (mg)
Valores indicativos para una ración de 100 g procesada de forma automatizada a partir de la información nutricional disponible en las bases de datos CREA* y FoodData Central**. No se trata de consejos alimentarios y/o nutricionales.
* CREATES Centro de Investigación sobre Alimentación y Nutrición: https://www.crea.gov.it/alimenti-e-nutrizione https://www.alimentinutrizione.it ** Departamento de Agricultura de los Estados Unidos, Servicio de Investigación Agrícola. FoodData Central, 2019. https://fdc.nal.usda.gov
Ingredientes para el crumble de fresas vegano
- 200 g fresas
- 60 g harina de avena
- 60 g azúcar moreno
- 60 g almendras (reducidas a harina)
- 3 cucharadas aceite de semillas
- 1 cucharadita canela en polvo
Procedimiento para preparar el crumble de fresas vegano
Lavamos bien las fresas y las cortamos en rodajas no muy finas.
Mezclamos en un bol las 2 harinas de avena y de almendras, añadimos la canela y el azúcar y mezclamos con una cuchara de madera añadiendo las cucharadas de aceite.
De esta manera se formará una mezcla granulosa.
Colocamos las fresas en el fondo del molde, procurando superponerlas lo mínimo posible. Cubrimos con la mezcla obtenida con los ingredientes anteriores.
Decorar al gusto, yo puse dos fresas por la mitad en el centro. <3
Horneamos en horno ventilado durante aproximadamente media hora a 180 grados, o hasta dorar.
Consejos para ti y variantes
Te aconsejo dejarlo enfriar bien antes de probarlo si no quieres quemarte, aunque es difícil esperar.
Puedes servirlo con una bola de helado de vainilla.
Este crumble se presta a muchísimas variantes: puedes sustituir las fresas por cerezas, manzanas, peras o higos, dependiendo de tu gusto o de la temporada.
Encuentra aquí la variante de cerezas
Para conservarlo, puedes dejarlo en un recipiente hermético hasta 5 días (pero seguro que no llegará a tanto)
FAQ (Preguntas y Respuestas)
¿Cuánto se conserva el crumble de fresas vegano?
El crumble de fresas vegano se conserva perfectamente en el frigorífico durante 3-4 días, dentro de un recipiente hermético. Puedes disfrutarlo tanto frío como ligeramente calentado en el microondas o en el horno, para recuperar toda su fragancia. ¡Es ideal para preparar con antelación y tener siempre a mano un postre sano y ligero!
¿Se puede congelar el crumble de fresas vegano?
¡Absolutamente sí! El crumble vegano de fresas se puede congelar ya cocido: solo tendrás que dejarlo enfriar completamente, porcionarlo (si quieres) y colocarlo en un recipiente apto para el congelador. Se conserva hasta 2 meses. A la hora de disfrutarlo, solo tendrás que descongelarlo en el frigorífico y calentarlo en el horno para que la superficie vuelva a estar crujiente. ¡Una solución perfecta para tener siempre a mano un postre sano!