Los mostaccioli blandos (también conocidos como «mustacciuoli» o «mostazzoli») son dulces de la tradición napolitana típicos de la Navidad que nunca pueden faltar en las mesas festivas junto con los roccocò y los struffoli.
Las galletas de Navidad son mi pasión, siempre preparo muchísimas junto con los dulces tradicionales boloñeses como el panone y la pinza.
Quería probarlos desde hace tiempo y hoy, después de haber leído decenas de artículos, me decidí, son realmente especiales y también muy sencillos de hacer. Estas galletas están presentes en todo el sur de Italia con recetas diferentes aunque muy similares.
La masa de los mostaccioli es blanda, aromática y especiada; después de amasar los ingredientes se dejan reposar durante 1 hora, luego se cortan con un cortador en forma de rombo (yo no lo tenía y usé un simple cuchillo de cocina) y se hornean durante 10/12 minutos, cuando están fríos se glasean con chocolate negro.
El ingrediente característico de los mostaccioli es el «pisto», un conjunto de especias que se utiliza en muchas recetas navideñas, en Bolonia existe un preparado similar que se encuentra en los supermercados con el nombre de «especias para panone» y es prácticamente idéntico.
Si no encuentras el «pisto» puedes hacerlo en casa, necesitarás canela, clavos de olor, nuez moscada, cilantro y anís estrellado.
Perfectos para regalar en Navidad, se conservan durante mucho tiempo en cajas de lata o bolsas específicas para galletas.
Os dejo algunas ideas para vuestra caja de galletas navideñas:

- Dificultad: Fácil
- Costo: Medio
- Tiempo de preparación: 30 Minutos
- Porciones: 20Piezas
- Métodos de Cocción: Horno eléctrico
- Cocina: Italiana
- Estacionalidad: Otoño, Invierno, Navidad
Ingredientes
- 250 g harina 00
- 100 g almendras (reducidas a granillo)
- 75 g miel
- 50 g mermelada de albaricoque (u otra mermelada al gusto)
- 100 g azúcar
- 25 g cacao amargo en polvo
- 4 g pisto (si no lo encuentras puedes hacerlo en casa con 3 g de canela, y 1 gramo de especias mixtas (clavos de olor, nuez moscada, cilantro, anís estrellado))
- 4 g amoníaco para dulces
- 60 g zumo de naranja (o agua o mosto cocido (yo usé mosto cocido))
- 1 cucharadita cáscara de naranja (rallada)
- 300 g chocolate negro al 60%
Herramientas
- 2 Cuencos
- 1 Balanza
- 1 Tabla de cortar
- 1 Cortador para mostaccioli
- 1 Bandeja de horno
- 1 Rejilla para dulces
- 1 Batidor
Pasos
Tritura las almendras con un cuchillo o en el robot de cocina hasta reducirlas a granillo.
En un cuenco vierte la harina, el granillo de almendras, el cacao amargo, el amoníaco para dulces y el pisto, mezcla muy bien.
En otro cuenco unifica la miel, la mermelada, el zumo de naranja y el azúcar, mezcla con un batidor y luego vierte todo en el cuenco con los ingredientes secos. Amasa la mezcla hasta obtener un bollo homogéneo suave y ligeramente pegajoso.
No añadas harina, para trabajarlo mejor ponlo en el frigorífico durante 1 hora envuelto en film plástico.
Después del reposo, transfiera el bollo a la tabla de cortar, enharina ligeramente el bollo por ambos lados y extiéndelo con el rodillo a un espesor de 8 mm.
Con el cortador para mostaccioli recorta rombos y colócalos en la bandeja de horno separándolos entre sí. Si no tienes el cortador puedes usar un cuchillo.
Reúne los recortes y haz más mostaccioli.
Hornea los mostaccioli en horno precalentado a 180° durante 12 minutos.
Los mostaccioli deben quedar blandos, la cocción puede variar de un minuto a otro (cada horno tiene una potencia diferente) pero ten cuidado de no cocinarlos demasiado, de lo contrario se pondrán duros.
Sácalos del horno y déjalos enfriar completamente.
Todas las galletas que contienen amoníaco para dulces deberían reposar durante un día antes de ser consumidas. Sé que muchos no lo hacen, pero en los cursos de pastelería me enseñaron a esperar un día antes de degustarlas. Si prefieres, puedes glasearlos inmediatamente, yo los cubro con film plástico y los glaseo al día siguiente.
Después del reposo, procedemos con el glaseado.
Tritura gruesamente el chocolate negro y derrítelo en microondas o al baño maría.
Sumerge un mostacciolo a la vez en el chocolate fundido de manera que quede perfectamente cubierto, ayudándote con un tenedor.
Colócalos sobre una rejilla para que eliminen el exceso de chocolate.
Transfiérelos a una bandeja de horno revestida de papel de horno y deja secar a temperatura ambiente durante algunas horas.
Los mostaccioli blandos están listos para ser degustados.
Consejos
Conservación
Los mostaccioli blandos se conservan durante 1 mes en una caja de lata o en bolsas específicas para galletas.
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FAQ (Preguntas y Respuestas)
¿Por qué mis mostaccioli se han vuelto duros?
La suavidad de los mostaccioli depende del tiempo de cocción, cuanto más se cocinan más duros se vuelven
¿Por qué el chocolate con el que glaseo los mostaccioli está muy denso?
El chocolate fundido está denso cuando contiene poco manteca de cacao, para la cobertura se debería utilizar un chocolate más fluido. Se encuentra fácilmente en el mercado, generalmente en pastillas.
¿Cómo hago para que el chocolate fundido esté más fluido?
Para hacer que el chocolate esté más fluido debes añadir una pequeña cantidad de manteca de cacao fundida, bastan dos cucharadas por 300 g. La manteca de cacao se compra en línea.
¿Por qué el chocolate con el que he glaseado los mostaccioli tiene muchas vetas blancas?
Las vetas se deben a la manteca de cacao que aflora en la superficie. Este defecto solo se presenta cuando el chocolate no está temperado.