Pasos

• Primero, ponga a calentar el agua para cocinar el pulpo en una olla grande con el tallo de apio lavado, las hojas de laurel y las bayas de enebro. Cuando esté hirviendo, sumerja el pulpo, mientras tanto límpielo.

• Tome el pulpo fresco o descongelado, con las tijeras haga un corte alrededor de los ojos y retírelos, saldrá un líquido blanco, luego siempre con las tijeras, dé la vuelta al pulpo y en el centro encontrará el pico, de color negro, elimínelo también extrayéndolo.

• Enjuague el pulpo bajo agua fría corriente, también el interior de la cabeza, luego golpee los tentáculos y el cuerpo con el mazo de carne para hacerlos más tiernos.

• Ahora que el agua hierve, sumerja primero las puntas de los tentáculos 2 o 3 veces para que se ricen, luego sumérjalo por completo y cocínelo durante 45 minutos a fuego medio-alto cubriendo la olla con la tapa.

• Transcurridos los minutos de cocción, verifique pinchando el pulpo con un palillo o tenedor, deberá quedar blando y pincharse fácilmente. De lo contrario, continúe la cocción por unos minutos más.

• Deje enfriar el pulpo en su agua de cocción durante 3/4 horas hasta que se entibie o enfríe por completo, sin la tapa.

• Una vez que esté tibio o frío, sáquelo de la olla, pase papel absorbente por todo el pulpo, retirando la capa oscura, gelatinosa y viscosa, luego corte los tentáculos en rodajas o trozos y condiméntelo o cocínelo como prefiera.