Pasos

• En el bol de la amasadora equipada con gancho de hoja o en el robot de cocina con cuchillas (o trabajando la masa a mano en un bol), vierta la mantequilla fría de la nevera cortada en cubos y el azúcar. Ponga en marcha la amasadora hasta obtener una consistencia arenosa.

• Al compuesto de azúcar y mantequilla, añada el huevo y una pizca de sal fina. Ponga en marcha de nuevo la amasadora hasta incorporarlos.

• Por último, añada la harina 00 y ponga en marcha por última vez la amasadora, trabajando la masa hasta que comience a compactarse.

• Transfiera la masa con la ayuda de una rasqueta a la mesa de trabajo formando un bloque, envuélvalo en papel film y póngalo en el frigorífico a reposar durante 30 minutos.

• Pasados los minutos de reposo de la masa quebrada en el frigorífico, sáquela y trabájela con las manos para suavizarla ligeramente, luego extiéndala con un grosor de 5 mm con el rodillo sobre la mesa de trabajo ligeramente enharinada.

• Con el molde en forma de fantasma, recorte aproximadamente 17 fantasmas de la medida de 10 cm x 6 cm (o de otro tamaño con el molde disponible, siempre que no sea demasiado pequeño).

• Coloque las galletas en la bandeja de horno cubierta con papel de horno, ponga las gotas de chocolate para los ojos de los fantasmas (si usa gominolas, póngalas solo cuando las galletas estén cocidas, ya que en el horno tienden a derretirse).

• Hornee las galletas en el horno precalentado a 180 grados y cocine durante 10/15 minutos en modo ventilado. Cuando estén cocidas, sáquelas del horno y déjelas enfriar completamente.

• Agregue una pizca de mermelada en las galletas donde no haya puesto las gotas de chocolate en lugar de los ojos y sobre ella pegue las gominolas.

• Finalmente, con los dedos o con un pincel humedezca ligeramente la superficie de la galleta y con la pinza coloque el algodón de azúcar encima, haciendo lo mismo con las otras galletas. Le recomiendo realizar este último paso justo antes de servirlas, ya que una vez colocado el algodón de azúcar, 15/20 minutos después tiende a secarse y a aplanarse.