Cheesecake Brounie, en otras palabras, dos postres en uno, una base de chocolate y una capa cremosa de queso. Siendo un postre americano no destaca precisamente por su ligereza y quizás por eso nos guste tanto. Mi versión probada y vuelta a probar ha dado excelentes resultados, he tratado de aligerar con ingredientes más sencillos y he simplificado la ejecución. Manteniendo todos los ingredientes principales pero con pequeñas modificaciones. Se podría sustituir el cacao con el chocolate si os apetece, no compromete el buen resultado del postre.
- Dificultad: Muy fácil
- Costo: Económico
- Tiempo de preparación: 20 Minutos
- Porciones: 8 personas
- Métodos de Cocción: Horno
- Cocina: Americana
- Estacionalidad: Todas las estaciones
Ingredientes
- 180 g Azúcar
- 2 Huevos
- 185 g Mantequilla
- 140 g Harina 00
- 1 cucharadita Levadura química
- 20 g Cacao amargo en polvo
- 400 g Queso fresco para untar
- 4 cucharadas Azúcar
- 2 Huevos
Herramientas
- Molde 20 por 20
- Amasadora
- Bol
- Batidora
Preparación
Poned en la amasadora el azúcar con los huevos, también sirve una batidora eléctrica, comenzad a montar los dos ingredientes, añadid la mantequilla a temperatura ambiente (al menos fuera de la nevera dos horas). Tamizad y unid la harina, la levadura y el cacao juntos. Utilizad para vuestra cheesecake un molde con papel de horno cuadrado 20 por 20, mientras tanto ponedlo a un lado y preparad la crema.
Preparad la crema así, batid los huevos con el azúcar y añadid el queso fresco para untar. La crema está lista.
Untad suavemente la crema de queso fresco sobre la base de chocolate.
Con el dorso de la cuchara haced pequeños surcos y cerrad (pequeños movimientos hacia adelante y regreso), hacedlo en toda la base de la tarta.
Más o menos como veis en la foto.
Meted en el horno a 190°C durante 30 minutos, cuando vuestra Cheesecake Brounie esté fría, cortadla en cuadritos.
¡Listos!
