El boureki cretense es una receta típica de la isla de Creta, una especie de pastel salado que tenía en mente realizar desde hace tiempo y agradezco también a quien amablemente me ayudó a realizarlo dándome ideas.
Es una especie de pastel salado con calabacines, patatas, queso myzithra típico de la isla que yo he sustituido con feta griega y ricotta de oveja, dado que aquí no se encuentra y siendo un queso de oveja hice una mezcla para acercarme al sabor original.
Hacía tiempo que quería realizarlo y finalmente lo preparé y debo decir también que en la mesa fue bien recibido.
La única cosa, que si tuviera que hacerlo de nuevo, tal vez cortaría un poco más finas las patatas, aunque estaban cocidas, tal vez cortadas más finas se incorporen mejor con los demás ingredientes. Para la receta utilicé la ricotta de oveja de la empresa Pinna formaggi, empresa rica en historia y sus productos son una garantía.
De todos modos les aconsejo probarla y si realizan esta u otras de mis recetas presentes en mi blog, envíenme sus fotos y las pondré en mi página de Facebook a su nombre.
Aprox. 600 Kcal por persona
- Dificultad: Fácil
- Costo: Medio
- Tiempo de preparación: 30 Minutos
- Porciones: 8 personas
- Métodos de Cocción: Horno eléctrico
- Cocina: Griega
- Estacionalidad: Todas las estaciones
Ingredientes para realizar el Boureki cretense
- 1 kg y 200 gr de calabacines
- 900 g patatas (pesadas sin piel)
- 250 g ricotta de oveja
- 250 g feta griega
- 4 cucharadas nata para cocinar
- 2 cucharadas de parmesano
- 150 g de tomates cherry
- c.s. orégano seco
- c.s. menta preferiblemente fresca (si no es posible, seca también va bien)
- c.s. sal
- c.s. pimienta
- 4 cucharadas aceite de oliva virgen extra
- 350 g harina 0
- 1 taza de café de aceite de oliva virgen extra (aprox. 90 gr)
- 2 cucharadas de Ouzo (licor griego, alternativamente licor de anís)
- c.s. sal
- c.s. pimienta
- 130 ml agua tibia
- 1 yema de huevo
- 2 cucharadas de semillas de sésamo
Herramientas
- 1 Fuente
- 1 Fuente Fuente de horno
Preparación del Boureki cretense
Primero, lavar los calabacines, quitarles los extremos, cortarlos en rodajas de aproximadamente 3 milímetros de grosor y reservar.
Luego pelar las patatas, lavarlas y cortarlas también en rodajas de aproximadamente 3 milímetros de grosor y reservar.
Lavar los tomates cherry y cortarlos en rodajas reservándolos.
Tomar la ricotta y la feta, batirlas juntas y reservar también.
Poner 2 cucharadas de aceite de oliva virgen extra en el fondo de una bandeja redonda o rectangular con bordes bastante altos, mezclar las patatas y los calabacines en un bol con orégano, menta, sal, pimienta, luego verter la mitad en la bandeja nivelando.
Luego distribuir la mitad de la mezcla de feta y ricotta, verter los calabacines y patatas restantes, nivelar, poner la feta y ricotta restantes, luego cubrir con los tomates cherry.
Finalmente mezclar la nata con el parmesano y distribuir sobre la superficie para completar la bandeja.
Poner un hilo de aceite igual a las 2 cucharadas restantes de aceite de oliva virgen extra e introducir en el horno caliente a 180°C durante aproximadamente 1 hora y 20 minutos, pero esto también dependerá del agua que suelten los calabacines, por lo que podría tomar más tiempo.
Mientras nuestras verduras se cocinan, preparamos la masa uniendo la harina, el aceite de oliva virgen extra.
El Ouzo, sal, pimienta y añadir de a poco el agua prevista hasta obtener un panecillo suave manejable.
Obviamente, el amasado se inicia en un bol para luego completarlo en una superficie de trabajo.
Cubrir la masa y dejarla reposar al menos 30 minutos.
Cuando las verduras estén cocidas, sacar del horno y dejar enfriar un poco mientras preparamos las láminas para el boureki.
Conseguir una bandeja rectangular de aproximadamente 24 cm x 35, dividir la masa en dos partes y extender una mitad en una lámina delgada cubriendo el fondo de la bandeja de manera que la masa también esté en los bordes.
Verter todas las verduras cocidas dentro del molde cubierto con la masa nivelando la mezcla, luego extender la segunda mitad de la masa, cubrir el pastel y sellar bien los bordes.
En un vaso, batir bien una yema de huevo con poca agua y untar la superficie del pastel salado, luego completar con una espolvoreada de semillas de sésamo.
Hornear a 180°C durante aproximadamente 20-25 minutos y al terminar la cocción, dejar reposar unos minutos antes de servir, luego cortarlo en 6 partes iguales y les aconsejo dejarlo aún en la bandeja por unos minutos para que sea más fácil servirlo, porque al estar caliente aún no es muy estable… esto no significa que quedará acuoso después de la cocción, sino que estará suave y por eso estos son solo consejos!
Prácticamente desde que se saca del horno hasta servirlo, pasarán al menos otros 20 minutos antes de ponerlo en el plato.

