Cappellacci de calabaza y speck

Receta cappellacci calabaza y speck con chips de topinambur y sésamo

Tiempo de calabaza, tiempo de pasar unas horas más en casa… Entonces se puede experimentar con recetas nuevas

Me gusta comer calabaza en todas sus variantes, tanto dulces como saladas

El tiempo fresco, el deseo de volver a las montañas, me hizo pensar en el verano recién pasado, con los arándanos recogidos en la cesta; me hubiera gustado también recoger setas y castañas, pero este año tuve que renunciar…

Diversos problemas me impidieron hacer excursiones a mis adorados castaños, de no poder saborear las setas recogidas a la sombra de los hayedos

Paciencia, lo haré la próxima vez, mientras preparo la pasta para los cappellacci con polvo de arándanos secos

Claro que el azul me jugó una mala pasada, la sémola amarillenta y los huevos naranjas de mis gallinas le dieron un tono marrón a la pasta de los cappellacci, pero estaban bonitos así también, el contraste con el naranja de la calabaza igualmente dio buenos resultados

Pasta hecha en casa, patatas y calabaza de mi huerto, el speck le dio su propio aroma y finalmente el sésamo tostado para sentir aromas y texturas diferentes.

  • Dificultad: Fácil
  • Costo: Económico
  • Tiempo de preparación: 1 Hora
  • Porciones: 4
  • Métodos de Cocción: Hervido, Fogón
  • Cocina: Italiana
  • Estacionalidad: Otoño, Invierno

Ingredientes

Patatas, calabaza y chips de topinambur….

  • 250 g sémola de trigo duro refinada
  • 2 huevos
  • 2 cucharaditas arándanos (deshidratados y pulverizados)
  • 1 calabaza (Pequeña)
  • 3 patatas
  • 6 lonchas speck (lonchas no demasiado finas)
  • 2 cucharadas sésamo
  • 3 cucharadas queso parmesano rallado
  • 2 pizcas pimienta negra
  • c.s. aceite de oliva
  • c.s. sal

Herramientas

Tabla para amasar, sartén y olla

Pasos

Amasar relaja, yo lo encuentro relajante… Una música de fondo, una copa de vino blanco seco… La libertad de un tiempo para encontrar pasión y satisfacción en lo que creamos con nuestras manos

  • Cortad la calabaza en trozos o excavád para obtener la pulpa… Yo opté por la segunda opción, quería usar la cáscara como contenedor

  • Poned 3 patatas a hervir con la piel, hasta que estén cocidas

  • Tras obtener la pulpa de calabaza, sofreíd el speck cortado en tiras, reservad unas pocas para decorar el plato. Agregad la calabaza y cocinad pero no demasiado, sal y dejad cubierto hasta su uso

  • Mientras tanto, mezclad la sémola, los huevos y el polvo de arándanos.

  • Obtendréis un bloque de masa de color marrón cálido. Cubrid con film hasta su uso

  • Tras haber hervido las patatas, peladlas y añadidlas a la calabaza y speck en un bol, agregad el parmesano y una pizca de pimienta negra; trabajad para mezclar todo después de haber aplastado las patatas y la calabaza con un tenedor. Preferí dejar el relleno no demasiado fino para poder sentir las diferencias de sabor en los ingredientes y no hacer un puré homogéneo.

  • Tomad vuestra masa, extendidla y cortadla en cuadrados de aproximadamente 4/5 cm por lado, colocad el relleno

  • …y dad forma a vuestros cappellacci

  • Ahora podéis tostar el sésamo que os servirá para terminar el plato y dar un toque de crujiente

  • Poned la olla con agua salada para cocinar vuestros cappellacci, y mientras cortad en rodajas finas algún topinambur, que después freiréis para hacer chips que serviréis con los cappellacci

  • Cocinad la pasta y sazonadla con poco speck salteado en aceite de oliva, acompañado de las chips de topinambur y las semillas de sésamo tostadas

  • No añadí queso por fuera, si os apetece, sois libres de hacerlo!

Como muchas pastas rellenas, es posible congelar, incluso por un solo día, para mantener intacta la forma; podéis prepararlas así con antelación. Si no queréis congelar y tenéis la necesidad de prepararlas el día anterior, colocadlas sobre papel de horno con poca harina de arroz, la humedad del relleno podría romper la pasta.

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Enza Squillacioti

Este blog es una dedicación a la cocina de la tradición más auténtica y sencilla. Aquí no solo se habla de comida, sino que se ofrecen consejos prácticos para obtener resultados impecables. Sumérgete en un mundo de recetas, relatos y profundizaciones sobre hierbas silvestres y alimentos olvidados, para conocer a fondo las costumbres y las raíces de nuestra cultura gastronómica.

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