La mermelada de kiwi es realmente deliciosa y con poco azúcar, ya que de por sí es una fruta bastante dulce, pero también depende de su maduración.
Te recomiendo que intentes hacerla, no requiere mucha atención, solo un poco de tiempo.
Te aconsejo conseguir kiwis de buena calidad y maduros en el punto justo, para que no estén demasiado blandos ni tampoco duros.
Para limpiarlos, te recomiendo no pelarlos para evitar que los pelos de la cáscara pasen de tus manos a la cacerola junto con la fruta, sino que los partas por la mitad y los vacíes con una cuchara.
En mi casa se consume principalmente mermelada de uva, pero debo decir que esta de kiwi es realmente muy buena… ¡pruébala para creerlo!
Las mermeladas en general en mi casa se usan bastante, tanto en el desayuno, como sobre todo en tartas y postres en general.
Si realizas alguna de mis recetas, envíame las fotos que las publicaré en mi página con tu nombre.
No te queda más que intentar hacer esta mermelada y estoy segura de que te sorprenderá.
Kcal 1790 aproximadamente totales
- Dificultad: Fácil
- Costo: Medio
- Tiempo de preparación: 20 Minutos
- Porciones: 2 tarros pequeños
- Métodos de Cocción: Fuego lento
- Cocina: Italiana
- Estacionalidad: Primavera, Otoño
Ingredientes para hacer la Mermelada de kiwi
- 2 kg kiwi
- 250 g azúcar
- zumo de 1/2 limón
- tarros de vidrio
Preparación de la Mermelada de kiwi
Primero, consigamos una cacerola de acero con fondo grueso y pongamos los kiwis sin cáscara, agreguemos el azúcar y exprimamos ½ limón.
Comenzar la cocción a fuego medio y con la cacerola tapada, cocinar durante aproximadamente 1 hora o hasta que la mermelada se haya reducido al punto deseado.
Al finalizar la cocción, pasar la mermelada por el pasapurés para que algunas semillas queden en el pasapurés y otras se trituren por completo y no las sientas en la boca.
En este punto, pon la mermelada de kiwi aún caliente en tarros de vidrio y sella bien.
Hervirlos en una cacerola con agua durante aproximadamente 20-30 minutos, contando el tiempo desde el inicio de la ebullición; al finalizar la ebullición, no los saques de la cacerola, hazlo solo cuando el agua se haya enfriado.
Guárdalos en la despensa por al menos 1 año, pero si no pierden la hermeticidad, se conservarán incluso por más tiempo.
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