Parece que los mostaccioli de San Francisco son muy antiguos y sus orígenes nos llevan a la noble dama Jacopa dei Settesoli, quien por primera vez llevó estos dulces a San Francisco como regalo y fueron realmente apreciados por él.
Según se cuenta, San Francisco hizo de estos particulares mostaccioli sus galletas favoritas y en Asís, según se cuenta, se convirtieron en las galletas típicas del Santo.
La masa hace pensar más que nada en una receta navideña o, en todo caso, invernal, ya que contienen frutos secos, miel y canela.
Durante la cocción seguro apreciaréis su aroma que inundará vuestra cocina.
Yo los he preparado basándome en una receta que me han señalado y espero que los apreciéis mucho, ya que estas galletas tan sabrosas en mi casa han tenido mucho éxito.
La masa se prepara realmente en poco tiempo y también la cocción es bastante breve, así que solo os queda probarlos.
Si realizáis alguna de mis recetas, enviadme las fotos que las publicaré en mi página con vuestro nombre.
Pues manos a la obra y realicemos estas galletas deliciosas y hacedme saber si os han gustado.
Aprox. 37 Kcal por cada galleta
- Dificultad: Fácil
- Costo: Medio
- Tiempo de reposo: 30 Minutos
- Tiempo de preparación: 10 Minutos
- Porciones: aproximadamente 55 mostaccioli
- Métodos de Cocción: Horno eléctrico
- Cocina: Italiana
- Estacionalidad: Otoño, San Francisco
Ingredientes para realizar los Mostaccioli de San Francisco
- 170 g harina 0
- 50 g miel mil flores
- 25 ml agua tibia
- 1 huevo mediano
- 65 g almendras peladas
- 50 g avellanas
- 1 cucharadita canela en polvo
- 100 g azúcar
- 1/2 cucharadita levadura en polvo para postres
- 10 g azúcar glas
Preparación de los Mostaccioli de San Francisco
Primero picamos finamente las almendras y las avellanas, verter todo en un bol y añadir la miel y el agua, mezclar bien.
Añadir la canela, el azúcar, la levadura, el huevo y finalmente la harina, mezclar bien hasta que todos los ingredientes se integren, verter sobre una superficie enharinada y crear un bloque… será ligeramente pegajoso, pero está bien así!!!
Dejar reposar en la nevera durante unos 30 minutos.
Tomar una hoja de papel para hornear y colocarla sobre la mesa de trabajo, enharinar y extender sobre ella la masa obtenida.
Extender con el rodillo a un grosor de aproximadamente ½ cm.
Cortar la masa en tiras verticales de unos dos dedos de ancho, para luego hacer cortes oblicuos y obtener el corte clásico del mostacciolo.
Mis galletas no son todas iguales, pero si las queréis perfectas, existen moldes.
Forrar una bandeja con papel para hornear y colocar las galletas, hornear en horno precalentado a 160°C durante unos 15-20 minutos, controlando la cocción, que variará según el tamaño y el grosor de la galleta.
