Los raviolis dulces de ricotta son una receta típica de Abruzzo, aunque el origen preciso es de un pequeño pueblo en la provincia de L’Aquila, Navelli.
La receta que os propongo es la que siempre se ha preparado en mi casa y es la receta original, así que confiad en las dosis y los ingredientes.
La versión que os propongo es la frita para ofrecer en Carnaval, pero también durante el año.
Esta receta nace como receta dulce condimentada con salsa, un poco peculiar, pero así es.
En mi casa siempre vi a mi abuela y a mi madre prepararlos y cada vez parecía que iban a preparar algo… sí, porque yo nunca los había probado!!!!
Un día decidí que debía hacerlos para que los probara mi marido y los hice tanto en versión con salsa como fritos.
Os preguntaréis cómo lo hago, ya que a menudo preparo recetas que nunca he probado… bueno, algunas cosas no las como, pero las preparo de todos modos para mi familia, y en este caso me guío por el olfato y luego dejo que mi marido haga la prueba final para estar segura del sabor… pero confío mucho en los olores.
Para la receta he utilizado la ricotta de oveja de la empresa Pinna formaggi, una empresa rica en historia y cuyos productos son una garantía.
Así que preparemos juntos los raviolis dulces de ricotta, siguiendo mis consejos y las distintas indicaciones en la receta!!!
Kcal 4000 aproximadamente en total
- Dificultad: Media
- Costo: Medio
- Tiempo de preparación: 30 Minutos
- Porciones: 50-60
- Métodos de Cocción: Fritura
- Cocina: Italiana
- Estacionalidad: Carnaval, Todas las estaciones
Ingredientes para la pasta para la elaboración de los Raviolis dulces de ricotta
- 4 Huevos medianos
- 1 pizca Sal
- 300 g Sémola de trigo duro repostada
- 100 g Harina “0” + la necesaria para la superficie de trabajo si es necesario
- 550 g Ricotta de oveja
- 1 Yema
- 3 cucharadas Azúcar
- 1 cucharada Canela en polvo
- Aceite de girasol o cacahuete
- 60 g Azúcar glas
Preparación de los Raviolis dulces de ricotta
Preparamos la masa y ponemos en un bol los huevos, los batimos y añadimos la pizca de sal, comenzamos el amasado poniendo la harina de sémola, mezclamos y continuamos la elaboración en una superficie trabajando un poco.
Luego añadimos la harina “0” y continuamos amasando hasta obtener una bola homogénea y sobre todo no pegajosa.
Como toda buena pasta abruzzese, la masa debe resultar bien firme, porque nos gusta la pasta “contundente”… en el sentido de que, por ejemplo, los fettuccine son bastante gruesos y para cocinarlos no se cocinan rápidamente precisamente por su elaboración.
Una vez obtenida la masa, déjela reposar cubierta mientras preparamos el relleno.
En un bol preparamos el relleno con la ricotta de oveja bien seca, preferiblemente la casera que es la mejor, añadimos la yema de huevo, el azúcar, la canela en polvo y mezclamos bien hasta que todos los ingredientes estén bien incorporados.
A este punto obtenemos las láminas con la máquina para pasta, recordando que en este caso no deben ser demasiado gruesas, pero tampoco demasiado finas.
Una vez obtenidas las láminas, colocar montones de relleno sobre las láminas a una distancia adecuada
luego cerrar la lámina en el sentido de la longitud presionando entre un ravioli y otro dejando salir el aire, luego cortarlos en la forma deseada y cerrarlos con la ayuda de un tenedor.
Ayúdese con las fotos disponibles en la receta para un buen resultado.
A este punto calentar el aceite y una vez alcanzada la temperatura, cocinar los raviolis a fuego medio.
Escurrir sobre papel absorbente y una vez enfriados servir con una espolvoreada de azúcar glas.

