La salsa de pimientos y tomates asados es algo delicioso que no puede faltar en las bruschettas veraniegas que tanto nos gustan, sobre todo acompañadas de parrilladas.
Esta salsa en particular es muy sencilla de hacer, aunque lleva un poco de tiempo, pero lo bonito es que se puede conservar en tarros y utilizarla también durante el invierno.
Conocí esta salsa gracias a una amiga de la familia que un verano vino a visitarnos y trajo esta salsa, obviamente a todos nos gustó y conseguí la receta.
Se puede usar recién hecha y conservar en la nevera por un máximo de 3-4 días, o bien hervir los tarros una vez llenos y así conservarlos incluso por 1 año.
Obviamente las calorías pueden variar según la cantidad de aceite que utilicemos para la conservación!
Si realizáis alguna de mis recetas, enviadme las fotos que las publicaré en mi página con vuestro nombre.
Aprox. 140 Kcal por cada tarro
- Dificultad: Fácil
- Costo: Medio
- Tiempo de preparación: 30 Minutos
- Porciones: 3 tarros medianos
- Métodos de Cocción: Parrilla
- Cocina: Italiana
Ingredientes
- 400 g Pimientos asados
- 150 g Tomates asados
- 40 g Perejil
- 4 dientes Ajo
- c.s. Sal
- 2 cucharadas Vinagre blanco
- 30 ml Aceite de oliva virgen extra + el necesario para conservar los tarros
- c.s. Pimienta negra
Preparación de la Salsa de pimientos y tomates asados
Primero asamos los pimientos y los tomates en el horno o en la parrilla como lo hice yo, luego los dejamos sudar en una olla separados por al menos 2 horas.
Limpiamos los pimientos quitándoles la piel chamuscada, las semillas y los lavamos bien, para los tomates les quitamos la piel y ponemos todo en un colador.
Tomamos el robot de cocina, ponemos los pimientos bien escurridos, los tomates usando solo la parte exterior, el perejil bien lavado, los ajos, sal, pimienta, aceite de oliva virgen extra y vinagre, trituramos todo hasta que esté finamente picado, si se quiere se puede hacer muy fino o un poco grueso.
Una vez triturado todo, ponemos la mezcla en tarros bien lavados y si los congelaréis, simplemente cerradlos y ponedlos en el congelador, si en cambio queréis conservarlos fuera del congelador, una vez puesta la mezcla en los tarros añadid el aceite de oliva virgen extra, sellarlos bien, sumergirlos en una olla con agua hasta cubrir los tarros y hervirlos durante 15 minutos contando desde que el agua comience a hervir.
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