El mes pasado preparé este estofado de seitán y salió realmente muy sabroso, en casa lo apreciamos mucho y aquí estoy escribiendo la receta en el blog. Seguí el mismo procedimiento del estofado clásico con patatas, zanahorias y guisantes, doré el seitán enharinado, luego lo desglasé con un poco de vino, añadí las verduras y lo guisé todo con el caldo.
Para ser sincera, lo que usé aquí es mi seitán casero pero como no tengo fotos del proceso, por ahora solo puedo sugerirte que lo compres ya listo al natural. Los puntos Weight Watchers son más o menos los mismos, tanto para el comprado como para el casero.
El plato final es realmente muy sabroso, un plato único vegano y ligero, muy abundante e ideal para cualquier ocasión. Vamos a prepararlo juntos…
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- Dificultad: Muy fácil
- Costo: Económico
- Tiempo de preparación: 10 Minutos
- Porciones: 2
- Métodos de Cocción: Cocina
- Cocina: Saludable
- Estacionalidad: Otoño, Invierno
Ingredientes
- 200 g seitán
- 10 ml aceite de oliva virgen extra (2 cucharaditas medidoras)
- 20 g harina integral (solo necesitarás 10g, el resto se descarta después de enharinar)
- 30 ml vino tinto (2 cucharadas medidoras)
- 1 cebolla
- 3 zanahorias
- 2 tallos apio
- 600 g patatas (pesadas peladas)
- 80 g guisantes congelados
- 500 ml caldo vegetal (yo lo preparo con el granulado vegetal)
- 2 cucharadas salsa de soja
- c.s. salvia
- c.s. tomillo
- c.s. sal y pimienta
- Puntos totales = 24 puntos WW
- Puntos por porción = 12 puntos WW
Herramientas
- Tabla de cortar
- Cuchillo
- Bol
- Pelador de verduras
- Pelador de patatas
- Cuchara de madera
- Cacerola
Pasos
Primero hierve medio litro de agua y disuelve un par de cucharaditas de granulado vegetal. Añade la salsa de soja y prueba: si es necesario añade otra cucharadita de granulado vegetal.
Corta la cebolla, las zanahorias y el apio en trozos.
En un bol pon la harina, un poco de sal, salvia y tomillo secos. Añade el seitán cortado en trozos y enharínalo bien. Verás que te sobrará harina, puedes conservarla un par de días para otras preparaciones.
Calienta 1 cucharadita de aceite en una cacerola y dora el seitán por todos los lados durante unos minutos.
Retira el seitán de la cacerola y por ahora resérvalo. Añade otra cucharadita de aceite y dora la cebolla, las zanahorias y el apio, ayudándote con un poco de agua o caldo si se seca demasiado.
Cuando la cebolla esté pochada, devuelve el seitán a la cacerola, sube el fuego y vierte el vino. Deja que se evapore durante un par de minutos, removiendo a menudo.
Ahora puedes añadir el caldo, ten cuidado, tal vez no necesites todo, las verduras no deben estar sumergidas.
Ahora tapa, espera a que empiece a hervir y deja cocinar durante unos 20 minutos a fuego lento.
Añade también los guisantes congelados y continúa la cocción durante otros 5-10 minutos o hasta que las patatas y los guisantes estén tiernos.
Y aquí está el estofado de seitán listo para servirse. ¡Qué buen aroma en la cocina!
Había probado a hacer el estofado con otros sustitutos de la carne y también había salido bueno, pero con el seitán para mí resulta el mejor en absoluto. El holandés lo apreció aunque obviamente no tiene el mismo sabor que la carne: pero si como nosotros amas a los animales y no quieres que se les haga daño, verás que este estofado es un excelente compromiso. Además, dentro de unos días empieza el Veganuary y si has decidido participar, esta receta te será de ayuda.
Prueba la receta y cuéntame si este estofado de seitán ha sido de tu agrado.
¡Buen provecho!
por Giovanna Buono
Conservación
Puedes preparar el estofado de seitán con antelación, de hecho, preparado el día anterior y luego recalentado, estará incluso más bueno. Seguramente puedes conservarlo en la nevera durante 3 o 4 días.
No estoy segura del resultado después de congelarlo, creo que se puede poner en el congelador y luego recalentar después de que se haya descongelado completamente, pero aún no lo he probado.
FAQ (Preguntas y Respuestas)
Soy intolerante al gluten, ¿cómo puedo adaptar esta receta?
Si no puedes comer seitán, puedes comprar chuletas de soja deshidratada asegurándote de que no contengan gluten. Rehidrátalas en un poco del caldo que prepararás para hacer el estofado, escúrrelas muy bien y luego procede según la receta.
