Las Braciole de Cotica son un verdadero homenaje a la cocina histórica y popular. Este plato, profundamente arraigado en las tradiciones del sur de Italia, sigue renovándose en nuestras mesas, celebrando un vínculo indisoluble con el pasado. Mi personal «contaminación culinaria» ha enriquecido mi repertorio con esta receta, transmitida por mi suegra. Aunque ella era romañola, Lugo di Romagna tierra de sol y campos, el suegro napolitano trajo a mi casa un valioso archivo de sabores, a medio camino entre la cultura de la Romaña y la Partenopea. Con mis raíces calabresas y la vida actual en Piamonte, podéis imaginar la riqueza y variedad de sabores que he encontrado en sesenta años: ¡cuántas tradiciones, cuántas recetas diferentes! Tengo muchísimas para contar y desarrollar. Algunas permanecen fieles a sus orígenes, repitiéndose fielmente cada año, mientras que otras se expanden. He logrado, a mi vez, transmitir a mis hijos estas raíces culinarias que resisten en el tiempo y encuentran terreno fértil para continuar su curso.

Podría deciros que es un segundo plato graso; ¡es cierto! Parece difícil; ¡no es verdad! Aquí, empezad desde aquí, un plato icónico de la cocina del sur, un plato rico en perfumes y en historia. Cuando la comida escaseaba, pero había algunas partes del cerdo que vendían por poco dinero, las familias comenzaron a sustituir la carne por las sabrosas y económicas coticas, con la salsa luego se podían condimentar los macarrones, ¿y qué más quieres?

A continuación, alguna otra receta de nuestras regiones del sur de Italia.