Pan de San Sebastián.
Desde hace algunos años en Cessole se ha retomado la tradición de la bendición del pan de San Sebastián, el santo al que dedicaron la iglesia bajo la parroquial Nuestra Señora de la Asunción.
Tuve el honor de poder conocer la receta y luego amasarla.
Una receta sencilla custodiada por Anna F. transmitida por Pinin.
Durante muchos años también se llevó a cabo el rito de los cantos y la flagelación, que con el tiempo y la edad se tuvo que abandonar.
Ahora algunas señoras del pueblo mantienen esta tradición, con devoción y cada año en ocasión del día festivo, San Sebastián precisamente, llevan como ofrenda el pan para que sea bendecido por el párroco y ofrecerlo a los participantes de la función, en la simplicidad de las pequeñas cosas hechas con la intención de transmitir emociones y saber.
En muchos pueblos aún se puede encontrar esta ofrenda al santo, que nace en los fríos inviernos de finales de 1600, para ofrecer un consuelo en tiempos de escasez.
Os propongo esta receta, en verdad muy similar a la receta del pan dedicado a San Blas que se celebra a pocos días de distancia. Son panes enriquecidos con alimentos simples para ofrecer un toque extra.
La diferencia esencial está en la forma: para San Sebastián se deben obtener panes alargados, mientras que el Pan de San Blas se trenza o se retuerce.
- Dificultad: Fácil
- Costo: Económico
- Tiempo de reposo: 15 Horas
- Tiempo de preparación: 30 Minutos
- Métodos de Cocción: Horno eléctrico, Horno
- Cocina: Italiana
- Estacionalidad: San Blas, Invierno
Ingredientes
Harina, leche, huevos y…
- 1 kg harina
- 2 huevos (pequeños. Más un huevo para pincelar.)
- 100 g mantequilla (O aceite de oliva)
- 150 g azúcar
- 15 g levadura de cerveza comprimida
- 200 ml leche (Más algunas cucharadas para pincelar)
- c.s. pasas
- 1 corteza de limón
Herramientas
- Cuencos
- Tapetes
Pasos
Amasar, dejar reposar, hornear
Unid todos los ingredientes en un cuenco, excepto las pasas, y añadid la levadura disuelta en la mitad de la leche tibia; amasad bien, y si es necesario añadid el resto de la leche. Finalmente, incorporad todas las pasas y mezclad bien.
Formad una bola y colóquela en un recipiente grande y cerrad; guardad en el frigorífico hasta la mañana siguiente, o por la noche si amasáis por la mañana.
Recuperad la masa y dadle forma de dos barras ligeramente aplastadas, pincelad con huevo y leche y espolvoread con azúcar en granillo. Esta operación servirá para crear una costra crujiente y bronceada. Dejad levar en un lugar cálido hasta que doble su tamaño. Recomiendo usar el horno con un cazo de agua hirviendo, calienta y mantiene la humedad adecuada.
Hornead en horno precalentado a 180 grados durante unos cincuenta minutos. Dejad enfriar y cortad.
Si cortáis vuestro pan inmediatamente, se verá más compacto. Tenía prisa, por lo que corté. ¡Os aseguro que quedaréis encantados! ¡Hacedmelo saber!
El Pan de San Sebastián se conserva por algunos días. Excelente empapado en vino blanco, para desayuno y merienda, o con una fina capa de mermelada de fruta.

